Algunas cosas de mi pueblo 2 (El Placero)
Al principio lo miraba de lejos…
Era extraña su figura grande, dibujándose al contraluz de la tarde con su manguera y su fresco chorro de agua, luchando contra la sequedad de la región.
De una punta a otra de la vieja plaza, llegaba el con su frescura, a calmar la sed de los rosales, de los pinos y del muerdago.
Aquí y allá una estaca para afirmar las débiles plantas que se debatían contra el viento patagónico.
Cuando no estaba regando vigilaba los juegos; gastados toboganes y chirriantes hamacas que de vez en cuando eran usurpados por algunos muchachotes ya crecidos o por alguna pareja que, helado en mano, jugaba a besarse entre el balanceo desigual del viejo columpio.
Una tarde comenzamos a conversar. Recuerdo su voz pausada que concordaba armoniosamente con su gesto bonachón.
En una oportunidad le pedí autorización para fotografiarlo. Se noto su gesto de asombro.
Hice un par de tomas y corrí a revelarlas en mi cuarto oscuro. Recuerdo que al obtener las primeras impresiones me quede largo rato observándolas; observando el rostro de aquel hombre que se me ocurría debía tener pies de hierba fresca.
Algunas tardes, cuando la plaza estaba desierta de voces, risas y vientos, era factible verlo de pie, entre los árboles, como intentando extender sus propias raíces es esa tierra que cuidaba con tanto denuedo.
Al verlo así, imaginaba que por las noches, al quitarse el viejo mameluco antes de irse a dormir, brotaban de su pecho bandadas de cantos de pájaros y luminosas risas infantiles, que alzaban vuelo y luego de revolotear por toda la habitación se posaban en su almohada para acompañar sus sueños. Al día siguiente retornarían a su pecho mientras bebía el humeante café de la mañana, para obtener de nuevo su libertad al llegar a la plaza. Una vez allí los cantos y las risas se distribuían estratégicamente dirigidas por el para hacer compañía al paseante solitario.
Si, en verdad lo veía casi como un mago. Su nombre: “Don Expósito” y era el placero de la vieja plaza.
Un día, creo que nadie sabe cuando, dejo de estar…imagino que ha de haber sido de noche, antes de recoger las voces y las risas, y que, con una breve lágrima habrá regado la última rosa...
Foto: El Cofla
Etiquetas: Cosas de mi pueblo
10 Comments:
que lindo, que homenaje! y en este dia.
Felicidades
¡QUÉ TREMENDAMENTE TIERNO!
Ya no era la plaza quien necesitaba de sus mimos y cuidados, era él mismo que necesitaba de ella: de sus plantas y de sus niños, de sus risas y sus besos.
Bella simbiosis unida por el agua de la vida.
Don Expósito te agradece desde mi cabeza, riega el rosal de tu memoria y se aleja con sus pies de hierba fresca.
Besos y recuerdos.
Qué bella forma de contar la historia de alguien que debe tener sus manos llenos de rosas, tu recuerdo se las regala.
Qué alegría tu paso por mi casa y
tu mensaje, lleno de acertividad en todos los conceptos.
Seguimos juntos.
Besos a ti y a toda tu familia
Y SE HIZO INMORTAL EN TU VOZ... QUE DESDE LA CERTEZA DE UN RECUERDO PREMONITORIO LE TRAE DE NUEVO... EL VIEJO PLACERO SEGURAMENTE HOY TAMBIÉN LIBERÓ UNA LÁGRIMA AGRADECIDA PORQUE LE CONSERVAS EN MEDIO DE LA VIEJA PLAZA QUE ACUNÓ SUS RAICES...
GRACIAS POR DECIR...
Quiero dejar huella, para que me recuerden así.
Besos y como siempre muy lindo tus post, que lindo escribís. Gracias por hacernos sentir cada vez mejor.
Paloma mensajera dice:
"Gracias por hacernos sentir cada vez mejor"
Yo diria gracias, a todos ustedes por seguir siendo el motor de estas letras
Qué lindos recuerdos me trajiste Flaqui...
Gracias y besossssssss.
gracias flaquito por poner esta imagen en internet,EL PLACERO como vos lo llamaste esta muy contento.Esas fotos estan colgadas en la pared de la casa de su hijo y siempre se preguntan quienes heran los que sacaron aquellas fotos donde viven no se si fuistes vos o algun conocido tuyo,pero igual miles de gracias por hacer feliz AL PLACERO.
ALDO ESPOSITO gracias por los comentarios que le hicieron a mi viejo EL PLACERO
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