Apartando telarañas
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Como bien diría mi amigo Néstor, uno escribe en su blog cuando tiene ganas, animo, y tiempo (aunque fundamentalmente cuando tiene algo para decir). A pesar de ello, uno se siente obligado hacia los otros, hacia esos invisibles amigos que nos han acompañado con su lectura, su visita, su comentario. Hay un tácito acuerdo con aquellos que nos leen y nos apoyan en seguir desovillando historias, sentimientos, opiniones.
Lamentablemente muchas veces las cosas no resultan como uno desea y surgen impedimentos de la más diversa índole que nos impiden anclarnos unos minutos en este espacio virtual. Cuando esto sucede uno tiende a dejarse llevar por esa inercia negativa y mas de una vez se descubre diciendo “…ma si…dejo el blog”, pero cuando estamos a punto de presionar la tecla que nos hará solo un recuerdo olvidable dentro de la red, sentimos que nos duele. Sentimos que este es un pedacito nuestro. Sentimos que si dejamos de publicar estamos abandonando a otros en el camino. Es como si huyéramos de nosotros mismos.
Por esto y ya superados todos los inconvenientes que nos sorprenden mas de una vez rompiendo nuestra cotidianeidad, abrimos las ventanas para ventilar, pasamos el plumero, sacamos las telarañas, metemos la inercia negativa en el cajón mas profundo de nuestra bodega y nos largamos nuevamente al camino de las palabras, las imágenes, los sentimientos, las alegrías y las broncas.
Para este re inicio de contacto he elegido dejarles algunas fotos de este nuevo y maravilloso “Otoño Patagónico”. No diré nada sobre el, ni de las hojitas que vuelan, ni de los pajaritos que tienen frío. Solo les dejo estas imágenes a modo de agradecimiento a todos los que siguieron visitando esta pobre página a pesar de su desactualizacion y a aquellos que con su preocupación se acercaron hasta mi correo.
Para todos ustedes: Muchas Gracias.
Lamentablemente muchas veces las cosas no resultan como uno desea y surgen impedimentos de la más diversa índole que nos impiden anclarnos unos minutos en este espacio virtual. Cuando esto sucede uno tiende a dejarse llevar por esa inercia negativa y mas de una vez se descubre diciendo “…ma si…dejo el blog”, pero cuando estamos a punto de presionar la tecla que nos hará solo un recuerdo olvidable dentro de la red, sentimos que nos duele. Sentimos que este es un pedacito nuestro. Sentimos que si dejamos de publicar estamos abandonando a otros en el camino. Es como si huyéramos de nosotros mismos.
Por esto y ya superados todos los inconvenientes que nos sorprenden mas de una vez rompiendo nuestra cotidianeidad, abrimos las ventanas para ventilar, pasamos el plumero, sacamos las telarañas, metemos la inercia negativa en el cajón mas profundo de nuestra bodega y nos largamos nuevamente al camino de las palabras, las imágenes, los sentimientos, las alegrías y las broncas.
Para este re inicio de contacto he elegido dejarles algunas fotos de este nuevo y maravilloso “Otoño Patagónico”. No diré nada sobre el, ni de las hojitas que vuelan, ni de los pajaritos que tienen frío. Solo les dejo estas imágenes a modo de agradecimiento a todos los que siguieron visitando esta pobre página a pesar de su desactualizacion y a aquellos que con su preocupación se acercaron hasta mi correo.
Para todos ustedes: Muchas Gracias.
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Contraluz
Imagenes: El Cofla
Etiquetas: Miscelaneas
5 Comments:
qué belleza.
me hiciste acordar de los paisajes que veo cuando vamos llegando a Neuquén :)
Como dice mi hija más chica "ni en pedo" se te ocurra borrar el blog o dejar de hacerlo, escriba cuando tenga ganas che, y si no dejalo dormir hasta que lo despiertes, nosotros pasamos, vemos que está durmiendo y seguimos, un día pasamos está despierto el blog y nos quedamos, como si fuera una casa. Lindas las fotos, el otoño por acá es muy colorido como bien lo sabés. Gracias por llamar, te iba a llamar pero me dijeron que estabas sacando telarañas y no quería molestar. Abrazos
Patagonia de dorados, verdes y transparentes. El único sitio donde una moneda yacente en un fondo de seis metros parece estar al alcance de la mano del ingenuo tripulante de chinchorro o bote neumático. Algunas imágenes dicen lo que no pueden millones de palabras. A todo esto, anteayer, por la tele, vi al Gallego Méndez convertir un gol. Los milagros existen, o yo necesito anteojos nuevos.
Peter Parker es también un ser humano... ;-)
Sol y sombra, Tierra y oro...¿quién tomó a quién??.
Será cierto aquello que decía A. Machado?:
"En tierra mala, el oro
luce mejor que enterrado,
y más en mano de pobres
que oculto en orza de barro."
Tan sólo sé que lo hiciste lucir con fulgor inusitado!!...serán tus manos???
Me gusta poder caminar bajo esos bellos caminos, desplazarme por las ramas, llegar hasta lo más alto y sentir ese roce dorado acunando mis sentidos...
Pensabas que ya no vendría???....tan sólo quise hacerte rabiar jeje
Alex:
Gracias por tu comentario. Sabes que vengo arrastrando una deuda conmigo mismo de hce mas de 30 años; cada otoño me propongo ir al valle a fotografiar y siempre sucede algo que lo impide. Como bien mencionas, el alto valle es un lugar inigualable en otoño, creo que mas que ver los colores y los contrastes, uno se sumerge en un mar de sensaciones; melancolia por las tardes, asombro por las mañanas...sabor a mate cocido y a leña ardiendo.
Un abrazo
Mi amigo nestor !!!
Un placer tenerlo por aca che !!!
Pensar que casi casi termino siendo el unico blogger de Catriel...pero no hay mal que por bien no venga...ahora tendre el gusto de verte metido en alguna IDEA jajajaja
Un enorme abrazo
Alfredo:
Como siempre, sus palabras son el detalle que brilla en estas paginas...de fulbo, ya hace tiempo que perdi las ganas de hablar...jeje
Un abrazo a la distancia...
Pegatina:
Siempre tan acertada y cercana, mas alla de cualquier silencio.
Creo que Don antonio, tendria que haber vivido en la patagonia.
Un beso
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